Cuando estás de cabeza el mundo parece diferente, todo está volteado, la ansiedad sube, tus ganas de reconocer todo como era antes se incrementan. Te sientes ajeno, diferente. Lo conocido se vuelve desconocido, no sabes que es lo mismo pero visto desde diferente ángulo. Pierdes la energía, la estabilidad y la calma, no sabes cómo responder a las circunstancias.
Cuando estás de cabeza comienzas a usar músculos y capacidades que no conocías, sientes que es dolor pues no estás acostumbrado, la vida no se detiene así que debes de continuar su curso con esta nueva condición. Tú mente te empieza a dar ideas de cómo salir de ese nuevo panorama, crees que debes voltear al mundo sin darte cuenta que el único que está volteado eres tú.
Cuando estás de cabeza te sientes perdido, incapaz y frustrado pues ves, respiras y te mueves diferente, verte así te hace desconocerte. No sabes si tienes las herramientas para seguir adelante en una nueva perspectiva por lo que que sin darte cuenta aprendes a conocerte de una nueva manera. Parece que la gente es alérgica al dolor, al sufrimiento y a lo humano por lo tanto se aleja, así que cuando estás de cabeza, empiezas a vivir tu dolor y a asumir tu nueva realidad solo. Solo pero no abandonado ya que cuando estás de cabeza es cuando más te encuentras contigo mismo, empiezas a reconocer tus capacidades, tus nuevos puntos de apoyo; pues cuando estás de cabeza no son los pies los que te hacen tierra y eso desconcierta; olvidas que tus raíces siempre están ahí sin importar con que las tocas.
Cuando está de cabeza te das cuenta que no solo debes de ser fuerte sino paciente, aprendes a respirar y mantener la calma aún estando volteado, a ser tolerante y dominar tu mente, es esta combinación la que te hace ir recuperando las energías poco a poco. No trates de mitigar el dolor o la incomodidad pues no se irá, pero tampoco te enfoques en eso, se creativo, enfócate en lo bueno, en un atardecer mágico, en ver cómo la mañana pinta de diferentes tonos las montañas, en los milagros cotidianos y los actos espontáneos de amor. Aprende a ver la belleza inesperada, a ver la vida como es y no como tu quieres que sea; así la disfrutarás mas;. incluso cuando estás de cabeza aprendes a disfrutar los problemas de la vida, a disfrutarla como es sin importar desde donde la veas.
Cuando estás de cabeza no te das cuenta pero cuando menos lo esperas ya todo regresó a su postura original y es ahí cuando te das cuenta que la vida aún a pesar de las dificultades es maravillosa.
Love, ∀