Pasa, el tiempo siempre pasa, ese no perdona, no se detiene, no se detendrá jamás. Pasa la vida, pasan vidas y pasas tu. Pero, ¿qué es lo que pasa mientras pasa? ¿Qué está pasando por ti, por tu mente?, ¿qué haces para mejorar día a día?. Me considero una persona con un corazón hippie y creo en las energías. Estoy convencida de que el año nuevo esta lleno de nuevas vibras que nos hacen dejar atrás lo que no nos gusta para visualizar un nuevo comienzo, un empujón, una gasolina, un puñado de fantasías que nos impulsa soñar lo que a veces da vergüenza.
Pero no creo en las supersticiones, este año no me puse calzones rojos y encontré al amor de mi vida. No puse dinero en mi zapato, sin embargo este año no me faltó nada. No saqué a pasear una maleta y aún así mi año parecía una vacación, visité países nuevos, ciudades nuevas pero sobre todo gente nueva. No comí uvas, ni pedí 12 deseos, mucho menos escribí 12 propósitos. Pero este año es en el que mas he cambiado, no tuve que escribir una lista de “buenas cosas” para haber hecho grandes cambios.
No fue suerte, ni fue fácil. El amor que llegó lo tuve que cuidar, no fue mágico ni perfecto pero fue increíble. Este año aunque no me faltó nada material me tuve que desprender de mi trabajo sabiendo que no me hacia crecer como persona. Pero todo esto no fue porque empezó una año nuevo, o porque vi en un 2015 una nueva oportunidad. Todos los cambios fueron porque yo decidí hacerlos suceder, y me esforcé para eso.
Hoy no solo voy al gimnasio y como mas sano; uno de los propósitos mas comunes del año; el cual logré cuando me dejé de preocupar en tener un mejor cuerpo y me ocupé por tener una mejor mente. Me despedí de personas que estuvieron a mi lado durante años pues aprendí a identificar que era lo que realmente me llenaba. Dejé de tomar, una de las decisiones mas grandes y que me hicieron mas fuerte este año. Dejé de salir a antros para empezar a entrar en mi mente y en mi corazón. Moviendo desde ahí mis acciones por aquello que verdaderamente me hacía sentido. Tuve que descuidar amistades para empezarme a cuidar a mi misma. Retomé hobbies como es el piano y los libros, y encontré nuevos como correr y el yoga.
El “cambio”; el cual yo llamo verdadero camino; comenzó cuando entendí que la vida se acaba cada que cierras los ojos, que cada mañana es una nueva oportunidad. Empezó cuando descubrí que yo decido como, cuanto y hasta cuando.
En el momento en que aprendí que la vida si se pasa y que al único que se le pasa es a ti mismo, que si no eres feliz y no haces nada por ti, nadie lo hará. Que las penas con alcohol parecerán ser menos, pero no se borran. Que el ejercicio cuesta trabajo pero te deja grandes recompensas. Comenzó cuando entendí que el camino a la felicidad era el menos adornado.
Hoy no pido felicidad, pido luz, paz y equilibrio. Deseo que sea hoy, mañana o a mediados del año se den la oportunidad no solo de ser mejores, mas grandes o mas ricos. Sino de superar los cambios y aprender de ellos. De identificar las situaciones y aceptar el bien.
“La verdadera grandeza…. No se mide por lo que alcanzas, sino por lo que superas”
LO MEJOR PARA EL 2016, A.